Vehículo fuera de control arrolló a aficionados a las afueras del RCDE Stadium; el partido fue momentáneamente suspendido
Una tragedia marcó el inicio del Derbi de Barcelona entre el Espanyol y el FC Barcelona, cuando un vehículo atropelló a un grupo de aficionados locales que se encontraban en las inmediaciones del RCDE Stadium, en espera de ingresar al recinto para presenciar el partido.
De acuerdo con información confirmada por la policía autonómica catalana, el atropello fue producto de un accidente; el conductor perdió el control del automóvil, resultando heridas leves entre siete u ocho personas. Pese a la magnitud del incidente y la tensión generada, las autoridades informaron que no hubo heridos de gravedad.
El caos ocasionado por el accidente provocó que, al minuto 8 del partido, un aficionado del Espanyol invadiera el terreno de juego, obligando al árbitro central a detener momentáneamente el encuentro. El cuerpo arbitral se dirigió a las bancas junto a elementos de la policía, mientras que el sonido local informaba sobre lo sucedido, lo que aumentó la preocupación entre los asistentes.
Después de una breve consulta entre el colegiado, los capitanes de ambos equipos y las autoridades de seguridad, se tomó la decisión de continuar el encuentro, el cual podría definir oficialmente al Barcelona como campeón de LaLiga.
Sin embargo, la continuidad del partido fue mal recibida por parte de la afición periquita, que consideró insensible la decisión frente a lo ocurrido. Muchos de ellos comenzaron a abandonar el estadio apenas iniciadas las acciones.
Enfrentamientos y caos en el exterior
La situación fuera del estadio no fue menos tensa. Tras el accidente, se registraron enfrentamientos entre aficionados y elementos policiales. En redes sociales comenzaron a circular videos impactantes, donde se observa a personas ensangrentadas siendo auxiliadas y otras aún tendidas en el suelo tras el impacto del vehículo.
La tragedia y el manejo de la situación han generado fuertes críticas hacia la organización del evento y las decisiones tomadas para mantener el partido en curso, mientras se exige una investigación a fondo sobre el incidente y el protocolo de seguridad implementado.