Las lluvias, que alcanzaron niveles nunca vistos en más de 60 años, derribaron puentes y carreteras y aislaron gran parte de esta región costera del océano Índico. Más de 250 escuelas se vieron afectadas y miles de casas fueron destruidas
15 de abril de 2022.- Las devastadoras inundaciones que azotan Sudáfrica desde hace cinco días causaron la muerte de 400 personas, 41 mil afectadas y autoridades estiman cientos de desaparecidos.
La mayoría de las víctimas han sido registradas en la región de Durban, ciudad portuaria del Kwazulu-Natal (KZN) frente al océano Índico, donde se concentraron las intensas lluvias que empezaron hace casi una semana.
El gobierno sudafricano no ha dado indicación alguna sobre el número de personas que están desaparecidas. Pero al cumplirse cinco días desde la catástrofe, los socorristas tienen escasas esperanzas de encontrar supervivientes.
“La fase intensa de rescate ha terminado en parte. Actualmente nuestro trabajo consiste principalmente en recuperar cadáveres”, declararon a medios internacionales miembro de los equipos de rescate.
El presidente Cyril Ramaphosa, que se hallaba en el Mpumalanga (noreste) con motivo de las fiestas de Pascua, lamentó la catástrofe que jamás se había visto antes en el país”.
Las lluvias, que alcanzaron niveles nunca vistos en más de 60 años, derribaron puentes y carreteras y aislaron gran parte de esta región costera del océano Índico. Más de 250 escuelas se vieron afectadas y miles de casas fueron destruidas.
Durante la mañana, voluntarios con guantes y bolsas de basura empezaron a limpiar las playas de Durban, que habitualmente están llenas de familias y de turistas.
Por su parte, las autoridades anunciaron la apertura de unos 20 refugios de emergencia que acogen a más de 2 mil 100 personas que quedaron sin hogar luego del desastre natural que se vive en el país. Así mismo, los funcionarios sudafricanos pidieron a la población que evite en lo posible el contacto con el agua potencialmente “contaminada”.
En tanto las previsiones meteorológicas anuncian nuevas tormentas y riesgo de inundaciones localizadas durante el fin de semana de Pascua.