Miles de limoneros de Apatzingán iniciaron ayer la tercera semana sin cortar el producto y claman la ayuda del gobierno tras ser extorsionados por el Crimen Organizado; pararon labores ante amenazas de secuestro y quema de huertas y empacadoras
Tras amenazas de grupos criminales que se disputan la extorsión al sector agrícola en la Tierra Caliente de Michoacán, miles de limoneros de Apatzingán iniciaron ayer la tercera semana sin cortar el producto.
El paro se acordó tras estar en medio de amenazas por parte de los grupos criminales de Los Viagras, Los Caballeros Templarios y el Cártel Jalisco Nueva Generación.
Como protesta ante la falta de respuestas de las autoridades y del gobierno federal, también hubo un paro en el transporte público y mantuvieron cerrados los establecimientos de Oxxo, que fueron atacados hace el 27 de agosto.
«Apatzingán está sitiado bajo amenazas y no hay forma de trabajar», relató la fuente, «entre productores que no quieren cortar y que no hay fruta para pagar esta amenaza.” Además de señalar que los grupos rivales los amenazan también si dan dinero al otro grupo.
«En la primera semana hubo miedo total. En la segunda semana, ya con más amenazas y necesidades tanto de mercado como de empresarios y productores, algunas regiones se reactivaron», dijo.
Señalaron que esta semana y la otra, en el municipio de Apatzingán las empacadoras se mantienen cerradas.
Un productor aseguró que bajo esta extorsión -que antes era de 10 centavos por kilo del producto, pero ahora es como de 2 pesos- siguen laborando los agricultores de Múgica, Parácuaro y Buenavista.
Miembros de la asociación de limoneros refirió que históricamente han pagado de 10 a 20 centavos por kilogramo de limón cortado y vendido del productor al comercializador, pero ahora, dijo, el incremento en la extorsión se dio luego de que “hubo una reunión de alianza entre células delictivas, que entre ellos se organizaron para cobrar, levantar, castigar y repartirse el dinero de las cuotas”.
Como respuesta gubernamental, el alcalde José Luis Cruz Lucatero, de Morena, presumió que, con apoyo del Gobierno estatal del también morenista Alfredo Ramírez Bedolla, están repartiendo 2 mil despensas a jornaleros afectados en comunidades como La Nopalera, Loma de los Hoyos y Presa del Rosario, lo que no resuelve el asunto de seguridad y de extorsión que viven.
Denuncian que la extorsión no es nueva pero se incrementó después de que en 2013 y 2014 el entonces Presidente Enrique Peña Nieto, a través de su comisionado Alfredo Castillo, reforzó a los grupos de autodefensas que se armaron contra Los Caballeros Templarios.
Añade que, en estos grupos se infiltraron líderes criminales locales que aumentaron su poder bajo el cobijo federal, y muchos de ellos siguen operando, como lo son Juan José Farías «El Abuelo»; Nicolás Sierra «El Gordo», líder de «Los Viagras», y Miguel Ángel Gallegos «Migueladas».