Aseguran que el convenio de la empresa Airbnb con el gobierno de la ciudad, promueve la gentrificación, el desplazamiento y la exclusión de los habitantes
Ciudad de México, a 2 de noviembre de 2022.- Airbnb, empresa dedicada a la promoción de alejamientos y el Gobierno de la Ciudad de México, dan la espalda a los habitantes de la ciudad de México al promover la gentrificación de amplias zonas de la capital y desplazar bajo métodos inadecuados a los ciudadanos, forzándolos a emigrar a zonas alejadas del centro.
Cada día son más las personas que acusan amedrentamiento y acosos para que abandonen los edificios en los que viven, en algunos casos han denunciado suspensión de servicios básicos como agua y energía eléctrica como forma de presionar a que abandonen sus lugares de vivienda.
De hecho, los quejos resaltan que la empresa y el gobierno de la ciudad anunciaron una alianza para impulsar lo que han denominado como «turismo creativo» y el fenómeno de los «nómadas digitales».
Manifiestan que el anuncio alienta a que los ciudadanos vean su derecho a la vivienda acotado, entre otros factores, por el aumento descomunal del arrendamiento temporal vía aplicaciones.
Nathan Blecharczyk, ignorando las quejas que el modelo de negocio genera entre los ciudadanos asegura que “Creemos que la tendencia del trabajo a distancia se va a quedar para siempre; como parte de ello, la gente se ha dado cuenta que no necesariamente tiene que trabajar desde su casa, por lo que usan esta oportunidad para viajar”.
Mientras tanto los quejosos relatan que hace unos días, Diana, de quien solo se dirá el nombre, recibió una notificación: tiene que desalojar el departamento en donde vive al interior de una casona ubicada en el Centro Histórico de la Ciudad de México.
La afectada narra, que el espacio que habita será convertido en una serie de habitaciones independientes que próximamente estarán ofertadas por Airbnb. Afirma que esta es la segunda vez que a sus 56 años es desplazada por la misma razón.
Ya antes, una mañana de diciembre de 2019, un par de abogados tocaron a la puerta del edificio en donde vivía, dijo que eran apenas las 7 de la mañana cuando les notificaron a los inquilinos que tenían hasta fin de mes para desalojar el lugar.
Aseguran que no entienden porque el gobierno, que se dice al servicio del pueblo, apoya su desplazamiento y desalojo para encumbrar a una empresa privada



































































