La presidenta Claudia Sheinbaum celebra reducción de precios y ve margen para que Banxico continúe bajando tasas de interés
La presidenta Claudia Sheinbaum celebró este jueves la baja en la inflación general a 3.55% durante la primera quincena de julio, una disminución notable frente al 4.13% registrado previamente, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Durante su conferencia matutina, Sheinbaum explicó que el reciente repunte inflacionario fue causado, principalmente, por el incremento en los precios de productos cárnicos como la carne de res, cerdo y pollo. Sin embargo, apuntó que esos costos ya comenzaron a estabilizarse.
“Es una reducción importante, de 4.13 a 3.55%, y eso nos habla también del margen para que el Banco de México pueda seguir bajando las tasas de interés”, afirmó la mandataria.
La jefa del Ejecutivo señaló que esta reducción en la inflación, sumada a una posible continuidad en el descenso de las tasas de interés, representa una oportunidad para atraer inversiones y mejorar el acceso al crédito en México.
De acuerdo con el INEGI, la inflación subyacente —que excluye productos de alta volatilidad como alimentos y energía— también registró una ligera baja, pasando de 4.28% a 4.25% anual, aunque aún permanece por encima del objetivo del Banco de México (3%).
Sheinbaum reiteró su respaldo a que el Banxico siga con la disminución de su tasa de interés de referencia, argumentando que esta medida “ayuda a la inversión” y puede fomentar la disponibilidad de créditos.
“Mientras menor sea la tasa de interés, más créditos puede haber y mayor inversión va a haber en nuestro país”, subrayó.
El Banco de México redujo su tasa interbancaria en medio punto porcentual a finales de junio, acumulando cuatro recortes consecutivos. Sin embargo, analistas advierten que el banco central podría moderar el ritmo de estos ajustes debido a que la inflación subyacente aún se mantiene por encima de su meta.
La reducción de la inflación refuerza las expectativas positivas del gobierno federal en materia económica, en un contexto en el que la atracción de inversiones y la recuperación del poder adquisitivo siguen siendo prioridades de la administración de Sheinbaum.