De pronto te pones de pie
Y tambaleas mi estabilidad.
De pronto todo
Tiene la capacidad de interrumpir
Los latidos del corazón
Te disculpas
Pero aun quieres discutir
“No te perdono” (susurro)
Y me voy a dormir
¿Te duele?, me pregunto
Aunque decido al tiempo ceder respuestas.
Paloma Kerr provoca mis emociones al enviar por correo una pequeña cajita de cartón, envuelta en una cinta roja y decorada con la moneda de la suerte, dentro encuentro 17 pequeñas tarjetas rectangulares. En el primer lado, su nombre. En el lado opuesto, poemas e ilustraciones. Palabras que atrapan suspiros, frases que intentan pescar almas, poemas que ella regala con generosa inspiración.
Cuando vives
Cumpliendo expectativas
Luchando por dotar de
Protagonismo tu vida
El resto
Lejos de ser suficiente
Se vuelve incoherente.
Veo sus fotos, escucho su voz, es tan joven, no ha cumplido todavía los treinta años y ya toda una aventurera de la palabra, trovadora de corazones, sirena que escribe poemas en la arena. Periodista de profesión, escritora por amor a las letras y su impacto, ha confesado con verdadera sencillez que través de sus historias planea llevarnos a diferentes escenarios, algunos cotidianos y reconocibles, otros distantes e imaginarios. Con tierno hechizo, pregunta: ¿Me acompañas en este viaje?
Invocaste a la probabilidad
Cuando dijiste:
“Tal vez un día te arrepientas de escribir sobre mí”.
Ahora que el futuro ha llegado
Confirmo, lo equivocado
Que desde entonces vives.
Jamás te quise en el olvido
Pues en estas letras encuentro
El castigo más certero
Que a tu ausencia aún reniego.
La leo conmovida, imagino a esa niña que evoca a su abuelo, el mismo que la enseñó a andar en bicicleta, el mismo con el que enceró moldes para el panqué de naranja, que iba por ella al colegio, que le cantaba para perderla en bellos sueños. Ese buen hombre que siempre le hablaba del Déjà vu, lo ya visto, lo ya vivido. Quizá por eso Paloma Kerr intenta con su poesía ir y volver del ayer, del hoy y del mañana. Posiblemente por eso regala poesía, para que los recuerdos no dejen de acumularse, para desempolvar la memoria. Posiblemente por eso, envía paquetes llenos de poesía.
Debatiendo entre
Mis memorias
Peleando por abandonar
Lo que no hice,
Me encuentro arrepentida
Divagando en esas frases
Que no se olvidan
Además de ser periodistas y haber escrito en diferentes medios como TV Joven México, ERRR Magazine, Oficinista y Grupo Expansión; Paloma Kerr está en constante acercamiento al conocimiento, para ella es un hábito que nunca se debe detener. Posterior a la universidad ha tomado cursos de ensayo, novela, redacción y literatura mexicana. Ella es mexicana y uso este seudónimo para ser leal a su corazón de poeta. Bien advierte: “Definitivamente las letras son mi pasión porque son la vía para hacer tangibles nuestras ideas”. Además de sus poemas, ha explorado la narrativa, fragmentos de su novela juvenil “El amor en tiempos digitales” pueden ser leídos en la Red. De igual manera, ha puesto su corazón de poeta en un proyecto generosa como Pangea México, una organización de la que es cofundadora y que se encarga de enviar libros a quienes amen la lectura: “Por más libros leídos. Por más historias descubiertas. Por más letras pronunciadas”. Fue así como me atreví a pedirle una de sus obras, fue así como me enredé en sus poemas. Pueden seguirla en su Facebook “Paloma Kerr”.