Habitantes temen “sacrificio ambiental”; Organizaciones denuncian falta de información y riesgos para la salud y el medio ambiente en la región
Por: Marco Romero Gaytán
Organizaciones y colectivos ambientalistas alzaron la voz este viernes en contra del complejo de economía circular propuesto por la presidenta Claudia Sheinbaum, en particular por el proyecto ambiental planeado para instalarse en la región de Tula, que también impactaría a los municipios de Atitalaquia y Tlaxcoapan.
Durante la presentación del plan federal, en Atitalaquia, manifestantes colocaron mantas y carteles expresando su preocupación por lo que consideran un riesgo ambiental y social para sus comunidades.
Aunque el proyecto busca aprovechar residuos para la generación de energía, el reciclaje de productos y el tratamiento de desechos, los activistas temen que las consecuencias superen los beneficios.
Una de las principales críticas es la falta de información detallada y transparente sobre el alcance del proyecto y sus posibles impactos. “No queremos seguir siendo el basurero de otros estados”, fue una de las frases más visibles en las manifestaciones.
Además, señalaron que la zona ha sido históricamente golpeada por industrias contaminantes, y temen que este nuevo complejo refuerce ese patrón, al convertir el territorio en un “sacrificio ambiental”.
Entre las consignas que pudieron leerse en las protestas destacaron:
«Queremos que el terreno de la fallida refinería Bicentenario se convierta en reserva ecológica por decreto.»
«El municipio de Atitalaquia no quiere seguir siendo basurero de otros estados.»
«Salud y Justicia Social para Atotonilco de Tula, Hidalgo.»
Los grupos ecologistas han exigido que el gobierno federal abra un proceso de consulta pública, con estudios de impacto ambiental y participación ciudadana antes de avanzar con la implementación del proyecto.
