Exhorta SEIINAC a no revictimizar casos de desaparición en Hidalgo

El llamado es a los medios de comunicación, autoridades y población en general que han emitido comentarios en espacios físicos y digitales que refuerzan estereotipos sexistas, misóginos y adultocéntricos, además de fomentar una cultura de revictimización, tras la localización de la adolescente que desapareció el 26 de abril

Servicios de Inclusión Integral y Derechos Humanos A.C, manifestamos nuestra preocupación por las formas en las que algunas autoridades, medios de comunicación y población en general se han pronunciado al respecto de la localización de una adolescente de 15 años, que desapareció el día 26 de abril y que ha sido localizada el día 29 de abril, con vida, lo cuál ha generado muchos comentarios en espacios físicos y digitales que refuerzan estereotipos sexistas, misóginos y adultocéntricos, además de fomentar una cultura de revictimización.

La revictimización, o doble victimización, es una forma de ejercer violencia hacia las víctimas al emitir comentarios, buscar explicaciones y asumir, basado en los prejuicios, qué fue lo que sucedió: enjuiciando, culpabilizando y estigmatizando, provocando una situación de vulnerabilidad. Estos actos no sólo son cometidos en la individualidad, si no también de forma colectiva.

A las autoridades se les solicita establecer comunicaciones con perspectiva de género, evitando siempre la revictimización, evitar dar datos que conduzcan o motiven a la sociedad a hacerlo.

Hablar sobre temas de violencia es necesario, pero es también una obligación hacerlo con una perspectiva de género, evitando el sensacionalismo y el morbo, ya que, de otro modo, solo estamos fomentando la violencia mediática hacia las personas.

Es necesario que los medios de comunicación asuman un compromiso firme de tratar la información para visibilizar hechos que forman parte de un fenómeno de violencia hacia las niñas, adolescentes y mujeres.

A la población en general, es importante emitir nuestras opiniones sin juzgar, ya que no conocemos las circunstancias o problemas que se han suscitado en las desapariciones, y es necesario tomar conciencia del problema estructural en el que vivimos: no son hechos aislados, son formas de continuar con un sistema que vulnera los derechos de las niñas, adolescentes y mujeres.

Que una persona aparezca con vida nos debe llenar de gusto. Que aparezca sin vida nos tiene que motivar a organizarnos para exigir que no se vuelva a repetir.

ATENTAMENTE

SERVICIOS DE INCLUSIÓN INTEGRAL Y DERECHOS HUMANOS A.C