La nueva variante B.1.X o B.1.640 del COVID fue detectada hace algunas semanas en la localidad de Bannalec, región francesa.
La nueva variante fue nombrada B.1.X o B.1.640 y hasta el momento se ha identificado en al menos 24 personas en una escuela de la región de Bretaña.
Por el momento se desconoce si esta nueva variante representa un riesgo mayor de contagio o representaría algunos otros problemas para la salud.
Autoridades de Francia aseguran que la situación se encuentra controlada y desde finales de octubre no se ha reportado otro caso de esta nueva variante; sin embargo, expertos mantienen vigilancia constante.
En Reino Unido también se han registrado algunos casos de esta variante y se mantienen en alerta para estudiar a detalle esta variante, incluso las autoridades han colocado a la B.1.640 como variante bajo supervisión.
De acuerdo con el profesor Cyrille Cohen, de la Universidad de Bar-Ilan, la variante francesa tiene algunos rasgos característicos que la alejan de otras variantes registradas en el mundo como la Delta.
Por el momento no se sabe si las mutaciones harían más o menos contagiosa a esta variante.