Arrestan a líder y seis miembros del Cártel de Sinaloa; la Fiscal Pam Bondi califica el operativo como “la mayor victoria en la lucha contra las drogas”
Estados Unidos realizó el mayor decomiso de fentanilo en su historia, al asegurar 3 millones de pastillas de esta droga sintética y detener a seis presuntos miembros del Cártel de Sinaloa, entre ellos Alberto Salazar, señalado como líder de la célula criminal.
La Fiscal General, Pam Bondi calificó el operativo como “la mayor victoria de nuestra nación en la lucha contra las drogas hasta ahora”.
Durante una conferencia de prensa, Bondi detalló que se incautaron 11.5 kilos de fentanilo, equivalente a tres millones de píldoras, además de 35 kilos de metanfetamina, 7.5 kilos de cocaína, 4.5 kilos de heroína, 45 armas de fuego y cinco millones de dólares en efectivo.
“Nos tomó meses de trabajo e investigación. Comenzamos desde los pequeños distribuidores hasta llegar a esta operación masiva, que representa un duro golpe para el narcotráfico en nuestro país”, destacó la fiscal.
La funcionaria también reveló que todos los detenidos estaban en territorio estadounidense de forma ilegal, y subrayó que no se contemplan extradiciones a México, ante la desconfianza en las autoridades mexicanas.
“No vamos a negociar con criminales que ingresan armas de destrucción masiva como el fentanilo a nuestro país. Si regresan a México, podrían ser liberados.”
Sin embargo Bondi reconoció la cooperación que ha existido con México, recordando casos como la extradición del asesino del agente de la DEA, Kiki Camarena, durante el gobierno de Donald Trump.
“Si los atrapamos, si los condenamos, los pondremos tras las rejas. No habrá negociación y los encerraremos el mayor tiempo posible. No negociaremos con quienes están asesinando a nuestros familiares, incluyendo hermanos, hermanas, hijas, hijos, padres, amigos”, advirtió la fiscal
Asimismo, explicó que el origen de los precursores químicos para la producción del fentanilo se encuentra en China, desde donde son enviados a México para su fabricación y posterior tráfico a Estados Unidos. Abundó que la droga era distribuía en Nuevo México, Arizona y Utah a través de la red operada por Alberto Salazar Amaya quien radica en Oregón, California.
La investigación sigue en curso y se espera que este operativo tenga un impacto significativo en las redes de distribución del fentanilo, una sustancia que ha sido responsable de miles de muertes por sobredosis en los últimos años.
