Alerta la Secretaria de Salud sobre riesgos en adultos mayores durante la temporada de calor, como la deshidratación, golpes de calor y diarreas
Durante la temporada de calor, comprendida entre los meses de marzo a septiembre, los riesgos de deshidratación aumentan significativamente entre la población en general, siendo los adultos mayores uno de los grupos más vulnerables.
En el estado de Hidalgo, los reportes indican que del 17 de marzo al 21 de mayo, el 46.2% de las atenciones por deshidratación y golpe de calor se han producido en personas de 60 años y más.
Estas personas han presentado principalmente enfermedades diarreicas y condiciones derivadas de la exposición excesiva al calor ambiental, como insolación, desmayos, lesiones en la piel, calambres y golpes de calor.
Por ello, la Secretaría de Salud de Hidalgo (SSH) insta a la población a reforzar las medidas de prevención y cuidado ante el incremento de las temperaturas ocasionadas por las olas de calor que afectan a todo el territorio nacional.
Además de los adultos mayores, otros grupos de riesgo incluyen a personas con enfermedades crónicas, recién nacidos, menores de cinco años, mujeres embarazadas, personas que trabajan o asisten a eventos al aire libre, deportistas, personas con discapacidad y quienes no tienen hogar, especialmente en zonas urbanas. Estas personas pueden experimentar efectos como agotamiento o insolación.
Las altas temperaturas también exacerban afecciones como enfermedades cardiovasculares, respiratorias y renales, así como problemas de salud mental, particularmente en aquellos sin acceso a espacios adecuados para protegerse del sol, sin hidratación adecuada o sin atención médica oportuna.
El cuerpo humano, ante el intenso calor, inicia un proceso biológico para intentar enfriarse. Cuando esta capacidad se ve desbordada, puede derivar en un golpe de calor u otras afecciones. El golpe de calor es una emergencia médica que requiere atención rápida para prevenir fallas orgánicas que pueden ser mortales. Los principales síntomas incluyen dolor de cabeza, confusión, náuseas, sudoración excesiva, mareos, pulso rápido, piel seca y caliente, desmayo e incluso convulsiones.
Recomendaciones para evitar el calor extremo:
- Evitar la exposición prolongada al sol entre las 11 y 16 horas.
- Realizar ejercicio al aire libre en las primeras horas del día o después de ponerse el sol.
- Usar ropa ligera, cómoda y de colores claros.
- Al salir, usar gorra o sombrero, lentes de sol, sombrilla y protector solar.
- Mantenerse en lugares frescos o a la sombra.
- Hidratarse constantemente, bebiendo aproximadamente un vaso de agua embotellada, hervida o desinfectada cada hora, y de 2 a 3 litros al día.
- Mojar la piel con un paño húmedo si es necesario.
- Utilizar ventiladores para ayudar a refrescar la temperatura ambiental.
- Caminar a la sombra cuando esté en la vía pública.
- Consumir alimentos ricos en vitaminas y minerales, esenciales para el funcionamiento del sistema muscular y vascular.
- Ventilar el automóvil antes de subirse.
- Buscar atención médica si se presentan síntomas de alarma.
Es crucial vigilar constantemente a las personas mayores, ya que con la edad se reduce la fuerza muscular, la sudoración, los niveles de hidratación y la sensibilidad térmica, lo que disminuye la capacidad de detectar y responder a los cambios de temperatura. La Secretaría de Salud de Hidalgo hace un llamado a toda la población a seguir estas recomendaciones para minimizar los riesgos asociados al calor extremo y proteger a los más vulnerables.
