Ante 15 mil personas, el colombiano ofreció un show explosivo y emotivo en el Palacio de los Deportes como parte de su gira mundial +Pretty +Dirty. Entre joyería de lujo, cercanía con sus fans y una sonrisa imborrable, el artista mostró su evolución personal y artística.
Por: Perla Baños.
Con una energía arrolladora y una sonrisa que nunca abandonó su rostro, Maluma se entregó por completo ante más de 15 mil personas en el Palacio de los Deportes, como parte de su gira mundial +Pretty +Dirty World Tour.
Desde antes de pisar el escenario, el cantante colombiano compartió con sus fans una transmisión en vivo desde su camerino, aumentando la emoción del público con cada paso. Cuando finalmente apareció, envuelto en un abrigo peludo que robó miradas, los gritos fueron ensordecedores. Al ritmo de “Borro cassette”, dio inicio a un espectáculo vibrante.
Una vez que se despojó del abrigo, Maluma lució un look en jeans y saco gris, dejando ver una silueta impecable. Pero más allá de los cambios de vestuario, brillaron los detalles de lujo, en especial la joyería con esmeraldas que portó en collar, rosario y anillo.
Sin embargo, lo más destacado de la noche fue el vínculo emocional que estableció con el público, abriendo su corazón y dejando ver la evolución que ha vivido no solo como artista, sino también como ser humano.
