La sierra gorda ha dado de que hablar en las últimas horas por los movimientos telúricos que se dejaron sentir y que alarmaron a la población.
Entre la noche del 4 de noviembre y el día 5 habitantes de los municipios de Zimapán y Pisaflores han reportado sismos lo que ha provocado una inquietud severa pues estos no son fenómenos comunes en la zona minera.
Además de los movimientos telúricos, los vecinos escucharon ruidos.
Al respecto, la subsecretaría de Protección Civil del Gobierno del estado informó que ayer 4 de noviembre los sensores registraron un sismo cuya magnitud fue de 3.7 grados en la escala de Richter.
De acuerdo con pobladores de Nicolás Flores, se sintieron al menos cuatro movimientos telúricos, incluso el primero los sacó de sus camas pues ya se disponían a dormir cuando ocurrió el primer temblor.
El Servicio Sismológico Nacional (SSN) añadió a la información oficial que el epicentro ocurrió a 27 kilómetros al este del municipio de Zimapán, específicamente a una profundidad de 4.5 kilómetros, lo que fue suficiente para que la población lo sintiera.
Autoridades estatales, establecieron comunicación con las alcaldías de Zimapán y Pisaflores, quienes no reportan afectaciones ni daños materiales y han pedido mantener la calma, aunque mantenerse atentos para tomar las medidas pertinentes.
