Dice que ese día tres familias más, fueron despojados de sus automóviles cuando transitaban sobre la vía México-Tuxpan, el iba a la zona norte de Puebla
Un sacerdote fue víctima de los asaltantes cuando transitaba en la México-Tuxpan a la altura de Acaxochitlán, Hidalgo, iba de visita a ver sus familiares a la zona norte de Puebla.
La experiencia fue por demás amarga, narró que unos sujetos que se hicieron pasar por policías lo detuvieron, le quitaron su camioneta y además se lo llevaron, lo subieron a un automóvil y con rumbo desconocido lo condujeron a él y a dos familias más, rumbo al monte y ahí en un paraje solitario los abandonaron.
Aunque su vida no estuvo en riesgo al obedecer a los maleantes, el párroco quien actualmente se encuentra asignado a una iglesia de Pachuca, pidió a los feligreses no viajar de noche por las carreteras de Hidalgo y del país, pues se han vuelto muy peligrosas.
Apuntó que mientras se ha dado a la tarea de denunciar, las propias autoridades le dijeron que este tipo de asaltos son muy comunes y que no van a parar hasta que la gente se organice y cierre carreteras o se manifieste para exigir más seguridad en las carreteras pues las estadísticas señalan que hay alrededor de 15 asaltos de este tipo a la semana y nadie hace nada.
“Doy gracias a Dios que estoy aquí, se llevaron la camioneta, pero esas son cosas materiales. Son horribles esos momentos que se pasan, pero salvamos la vida”, exclamó.
Apenas la semana pasada el Arco Norte volvió a ser señalado como una de las carreteras más peligrosas debido a los asaltos y robos que se cometen y donde los delincuentes han abierto brechas para escapar con los automotores y con mercancías.
