Tormenta de arena envuelve a varios países de Oriente Medio

El fenómeno no es raro en una región con desiertos, pero su frecuencia aumentó en los últimos meses, alimentado por sequías y bajas precipitaciones relacionadas con el cambio climático, advierte Hassan Abdallah, del centro meteorológico WASM, en Jordania 

Mayo 17, 2022. – Este martes varios países de Oriente Medio como Arabia Saudita, Bahrein, Qatar, Emiratos Árabes, Irán, Kuwait y Jordania resultaron afectados por una gran tormenta de arena, que provocó hospitalizaciones, cierres de escuelas, perturbaciones en el tráfico vial y aéreo.

Condiciones similares fueron observadas en otros países del Golfo como Bahrein, Qatar y Emiratos Árabes Unidos.

Una espesa neblina gris hizo que fuera casi imposible de ver a uso cientos de metros los edificios emblemáticos de Riad, como el rascacielos Centro del Reino.

El vecino Irak ha experimentado ocho tempestades de arena desde mediados de abril. La última provocó el lunes la hospitalización de cerca de 4 mil personas por trastornos respiratorios, y el cierre del aeropuerto a causa «de una visibilidad de 300 metros», así como escuelas y administraciones públicas en todo el país.

En Irán, las administraciones, las escuelas y las universidades estaban cerradas este martes en varias provincias a causa de las tempestades de arena, según los medios estatales.

En Kuwait, el tráfico aéreo fue suspendido durante una hora y media el lunes, y el tráfico marítimo en los tres puertos siguió suspendido el martes en la tarde.

El centro de meteorología saudita había pronosticado vientos superficiales polvorientos en el este y en Riad.

También se esperaban tempestades más al oeste, en las ciudades sagradas de La Meca y Medina, según el pronóstico.

En el centro de Riad, la arena se acumuló en coches y edificios, y los residentes se esforzaron por mantenerla fuera de sus casas.

la frecuencia de las tormentas aumentó en los últimos meses en la región, debido a la llegada de masas de aire seco y frío fuera de temporada lo que contribuye a la proliferación de las tempestades de arena en el este de Siria e Irak «y luego su transmisión hacia la península arábica», explicó Hassan Abdallah, del centro meteorológico WASM, en Jordania.

La frecuencia y la intensidad del fenómeno se explica por varios factores, como el bajo nivel de las aguas del Tigris y del Éufrates, la fluctuación de las precipitaciones anuales y el deterioro de los suelos.

Advirtió Hassan Abdallah que para enfrentar el problema, los países de la región deben sembrar más árboles y «emprender con urgencia medidas contra el bajo nivel de los ríos Tigris y del Éufrates».

!Apocalíptico!