Los criterios del Comité Noruego del Nobel para entregar el Premio de la Paz han cambiado de acuerdo con el contexto sociopolítico
El Premio Nobel de la Paz ha sido otorgado 103 veces, 92 a hombres, 16 a mujeres y 27 a organizaciones sin fines de lucro. De acuerdo con lo estipulado en el testamento de Alfred Nobel, el premio es para la persona «que haya hecho el mayor o el mejor trabajo por la fraternidad entre las naciones, por la abolición o reducción de los ejércitos permanentes y por la celebración y promoción de congresos de paz».
Dicha moción cambia respecto al contexto, político, económico y social de cada época. Por ejemplo, durante la Primera Guerra Mundial, el nobel de la paz fue dado a personajes pioneros del Movimiento Organizado por la Paz. Mientras, en períodos entre guerras tuvieron mayor peso aquellas acciones de funcionarios enfocadas en promover políticas de estabilidad y justicia, mediante acuerdos internacionales. Posterior a la Segunda Guerra Mundial, el premio fue concedido a diversas organizaciones, focalizadas en la labor humanitaria.
En 2023, el Comité Noruego del Nobel otorgó el premio a Narges Mohammadi, una mujer iraní que ha defendido los derechos humanos y luchado contra la opresión y discriminación sistemática. De acuerdo con un comunicado, el Nobel le fue entregado «por su lucha contra la opresión de las mujeres en Irán». Si bien «el tremendo costo personal» no es mencionado como un motivo que la convierta en acreedora de este reconocimiento, el comité tomó en cuenta el que Mohammadi dedique su vida a este propósito.
Desde 2021, parece haber una tendencia del Comité del Nobel respecto a luchas, movimientos y esfuerzos relacionados con «la libertad de expresión». Ales Bialiatski, recibió el premio de la paz en 2022 por su «esfuerzo sin precedentes para documentar crímenes de guerra, violaciones de derechos humanos y abusos de poder». En relación con la libertad de expresión, se menciona, este acervo permitió exponer las protestas y manifestaciones de las personas en contra de las autoridades de Bielorrusia. Del mismo modo, en 2021, el comité decidió dar el premio a Maria Ressa y Dimitry Muratov, por «sus esfuerzos para promover la libertad de expresión, que es un requisito previo para la democracia y la paz duradera». Sin embargo, en ese momento se le dio mayor prioridad a la defensa de la democracia y la libertad, desde el periodismo.
Previo a ello, en 2020 el Nobel de la Paz lo obtuvo el Programa Mundial de Alimentos de la ONU. Ante los «esfuerzos en vista de la lucha contra el hambre y su contribución para mejorar condiciones de paz en zonas de conflicto». La determinación para otorgar el Nobel, en 2015, al Cuarteto para el Diálogo en Túnez, en 2016, a Juan Manuel Santos y en 2019, a Abiy Ahmed, también se basó en acciones relacionadas con mejorar las condiciones de paz. Como lo fue la reconciliación de Abiy Ahmed entre Etiopía y Eritrea, las contribuciones de Santos para poner fin a la guerra interna en Colombia y los movimientos políticos encabezados por el Cuarteto para el diálogo que favorecieron la transición democrática en Túnez.
Mientras, los premios entregados en 2013, a la Organización para la Prohibición de Armas Químicas, en 2014 a Malala Yousafzai, en 2017 a la Campaña Internacional para Abolir las Armas Nucleares y en 2018 a Denis Mukwege, respondieron a acciones para erradicar las armas y la violencia a nivel global. Aunque, de 2013 a 2020, la tendencia hacia cierto tipo de iniciativas para promover la paz no fue tan marcada en el Premio Nobel, este estuvo relacionado con el contexto global de cada momento.