Delegado acusa que al menos 50 familias afectadas quedaron fuera del registro mientras personas sin daños recibieron apoyos.
El delegado de Huehuetla, Moisés Barragán García, denunció que el censo del Bienestar realizado tras el huracán Priscila registró a personas sin afectaciones y dejó fuera a familias que perdieron viviendas, documentos y pertenencias.
Señaló que familiares del expresidente municipal Javier Santillán y de la regidora Dulce fueron incluidos en los apoyos de 20 mil a 100 mil pesos, pese a que sus casas no sufrieron daños. Indicó que incluso acudieron a otros municipios a cobrar para evitar señalamientos.
Por el contrario, afirmó que alrededor de 50 familias afectadas no fueron censadas debido a la pérdida de documentos o a que la presidencia municipal no brindó servicios durante la emergencia. “No tuvieron la sensibilidad de decir: ‘denle al que lo perdió todo’. Eso indignó al pueblo”, expresó.
El delegado sostuvo que un grupo de habitantes acudirá a Palacio de Gobierno para exigir una revisión del censo y un registro real de damnificados. Añadió que, mientras la ciudadanía y el gobierno federal sí entregaron ayuda, la autoridad municipal “actúa como tortuga” y no atiende las necesidades en comunidades donde aún se retira lodo y no se restablece el acceso seguro.
Barragán afirmó que seguirán manifestándose hasta garantizar que los apoyos lleguen a quienes verdaderamente lo necesitan.
