Durante la conferencia matutina, el presidente Andrés Manuel, reconoció que la inflación es mayor que en otros sexenios debido a la pandemia de Covid-19
Ciudad de México.- Esta mañana el presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que la inflación que enfrenta su gobierno es todo un desafío, pues es más alta que la que hubo en otros sexenios debido a la crisis por la pandemia de Covid-19.
“En los últimos tiempos (la inflación) se nos subió más, que en lo más alto de (Enrique) Peña Nieto que fue de 6.77 por ciento, aquí estamos en 7.37 por ciento; con Calderón fue de 6.53 por ciento”, dijo.
No obstante, destacó que el peso solo se depreció un 0.8 por ciento, no se ha contratado deuda y se ha mantenido el récord histórico en la creación de empleos.
“Con la pandemia el peso se nos fue a más de 25 por dólar y ya se logró bajar y estamos prácticamente igual que cuando inició el gobierno, no ha habido depreciación de la moneda. Esto no se veía desde hace mucho tiempo”, aseguró.
A ello se le suma que la Bolsa Mexicana de Valores ha tenido un incremento de 27.7 por ciento desde 2018.
Agregó que las reservas del Banco de México ascienden a los 200 mil millones de dólares y se han incrementado 16.4 por ciento en lo que va de su sexenio.
Así, el mandatario mexicano, aseguró que la inflación y la carestía no se han comido, ni se comerán los incrementos al salario mínimo, pues eso sólo ocurría durante el periodo neoliberal en el que la inflación siempre estaba por encima del salario mínimo.
“Desde luego que la inflación, la carestía afecta, pero como nunca en la historia reciente se había aumentado tanto el salario mínimo por eso no se lo ha comido, se lo comía, se lo tragaba en el periodo neoliberal», manifestó.
“En más de 30 años no se había aumentado el salario como ahora, es un timbre de orgullo de nuestro gobierno y se ve reflejado, ya vimos cómo está arriba la inflación”, dijo
En ese sentido, comprometió que su Gobierno seguirá defendiendo la economía popular, enfrentando factores externos.
López Obrador agregó que otra buena noticia para los mexicanos es que no hubo incrementos a los precios de la gasolina en este arranque de año tal como hubieran querido sus adversarios para luego atacarlo.
“No aceptan que la gasolina no ha aumentado en términos reales y cuando sí había gasolinazos en sexenios pasados callaron como momias”, fustigó.
Dijo que están muy molestos porque perdieron sus privilegios, porque ya no se les permite robar
Mencionó que cuando inició su gobierno, la tasa de interés era de 8 por ciento y el Banco de México la redujo en estos tres años al 4 por ciento y aún con el incremento inflacionario actualmente se está en niveles más bajos que en la pasada administración.