Este 1° de febrero arrancó con la política de aranceles de Trump sobre México, Canadá y China, pero las autoridades ya se preparan con contramedidas.
Los primeros aranceles del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, entraron en vigor este sábado 1 de febrero con motivo de los impuestos aduanales, como sanciones emprendidas sobre México, China y Canadá.
De acuerdo con la Casa Blanca, las tarifas de aranceles de la nueva administración serán de 25% para México y Canadá; y de 10% para China.
Asimismo, la Oficina del Representante Comercial reportará los resultados de los aranceles el primero de abril, un mes después de la implementación de esta política comercial.
Aranceles de Trump como sanciones con motivos políticos
Como parte de los motivos detrás de la política de aranceles, se encuentran las motivaciones proteccionistas del Partido Republicano para acelerar la producción local de mercancías.
No obstante, el presidente estadounidense emitió el paquete de impuestos aduanales contra México como sanciones por el ingreso de personas migrantes y la estancia de migrantes irregulares en territorio estadounidense.
Por su parte, los aranceles contra China responden a la postura de las autoridades estadounidenses respecto a la responsabilidad por la crisis del fentanilo.
Según una serie de comunicados del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, los republicanos y demócratas señalan al gobierno chino como proveedor de la materia prima para la fabricación de los opioides sintéticos que desataron una crisis de salud pública en Estados Unidos.
En la opinión de expertos de organizaciones, la imposición de aranceles podría tener un efecto negativo en la economía estadounidense.
Si bien la medida pretende incentivar la producción local, las cadenas de suministro dependen de las importaciones para su funcionamiento óptimo, y de resultar afectadas incrementarán los precios para el sector consumidor.
La amenaza de aranceles no se limita a México, China y Canadá, pues entre los territorios aludidos para las próximas tarifas se encuentran Colombia y Taiwán.
Latinoamérica y Canadá responden a las amenazas de Trump
El secretario de economía de México, Marcelo Ebrard, reiteró los efectos de los aranceles estadounidenses frente a los medios.
Tras criticar la imposición de nuevas tarifas, el vocero informó que debido a la participación de México en las cadenas de suministro, esta medida afectará a 12 millones de familias estadounidenses.
Respecto a la presidenta Claudia Sheinbaum, la jefa del Ejecutivo Federal informó tener un paquete de planes como medida de diálogo para responder a los aranceles.
Aunado a las declaraciones de las autoridades mexicanas, los gobiernos de Colombia y Brasil respondieron a las sanciones comerciales del presidente Trump.
Mientras el presidente colombiano, Gustavo Petro, decidió emprender una campaña para recibir a las personas connacionales radicadas en Estados Unidos, su homólogo en Brasil sostiene una postura de respuesta con sus propios aranceles.
El conflicto con el presidente de Colombia ocurrió ante la posibilidad de recibir un paquete de aranceles como consecuencia de la migración sin documentos. A través del perfil oficial de X, Petro se opuso inicialmente a las sanciones el 27 de enero; pero decidió apelar a la recepción de colombianos migrantes frente al gobierno de Trump.
Respecto a Brasil, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva advirtió el 30 de enero: si Estados Unidos decide imponer aranceles, su gobierno responderá con un paquete de impuestos aduanales. La figura de Brasil en el panorama de aranceles estadounidenses recordó la coyuntura de intereses comerciales entre el país norteamericano y las naciones del bloque BRICS, donde se encuentran los socios de Brasil, China y Rusia.
Finalmente, el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, advirtió que tomará medidas contra los aranceles de Estados Unidos. A través de sus canales de comunicación oficiales el 31 de enero, el mandatario subrayó que busca la manera de prevenir los impuestos aduanales antes de su entrada en vigor.