El olvido no llega, el dolor está latente entre los deudos de quienes atraídos por la gasolina gratuita se acercaron, pero nunca imaginarían la pesadilla que les esperaba, tras la explosión muchos quedaron calcinados a un costado del ducto, otros corrían tratando de apagar las llamas que consumían sus cuerpos.
De la euforia a los lamentos, así fue lo que se vivió la tarde del 18 de enero de 2019 en una parcela de San Primitivo. Todo era una fiesta para cientos de habitantes de Tlahuelilpan y comunidades cercanas que no hallaban como recolectar gasolina que salía a presión de un ducto de Petróleos Mexicanos que fue ordeñado, pero la fuga salió de control y eso originó la tragedia que dejó oficialmente 137 muertos.
Para las familias de Tlahuelilpan, municipio que forma parta de la región Tula-Tepeji, recordar estos trágicos sucesos, es llenarse de amargura, pues perdieron familiares y amigos y ahora cargan con el estigma de ser un pueblo “huachicolero”.
La tarde de ese viernes, muchos solo llegaron por curiosidad, otros llevaban cubetas, bidones y cualquier otro tipo de recipiente donde pudieran llevarse la gasolina. Fueron varias horas en las que, ante la presencia de soldados, la gente se acercaba al ducto para llevarse la gasolina.
Reían, charlaban, se organizaban para poder acercarse con sus contenedores, pero de un momento a otro, hubo una chispa y se produjo la explosión, muchos quedaron muertos al instante y calcinados, otros fueron alcanzados por las llamas y entre lamentos corrían para pedir ayudar.
🗓️ Hoy se cumplen 6 años de la explosión en un ducto de Pemex en Tlahuelilpan #Tlahuelilpan #Hidalgo #SanPrimitivo pic.twitter.com/uaEop1qWgx
— Noticias Énfasis (@enfasisnoticias) January 18, 2025
Revivir los videos, las imágenes y los crudos testimonios es escalofriante, pero eso ocurrió en ese poblado que se creyó dejaría una lección para no volver a perforar un ducto, sin embargo, eso no ha pasado, la ordeña ilegal de los ductos de Pemex se mantiene pese a todos los esfuerzos institucionales encabezados por el Gobierno de Hidalgo y las fuerzas federales.
El escenario actual del huachicoleo en Hidalgo
El secretario de Gobierno de Hidalgo, Guillermo Olivares Reina, sostuvo que Hidalgo, salió del deshonroso primer lugar del robo de combustible, y que no han bajado la lucha contra este delito.
Mencionó que a través de la Secretaría de Seguridad Pública se mantiene coordinación con las fuerzas federales, en este caso la Guardia Nacional y la Sedena que vigilan la red de ductos y poliductos que cruzan por una veintena de municipios.
El funcionario estatal, recientemente encabezó una conferencia del Gabinete de seguridad, fue la primera del año y ahí tanto los representantes de las fuerzas federales aseguraron que han sido blindados los ductos a través de su revestimiento con cemento.
“Los ductos están siendo encofrados y la línea por donde cruzan es vigilada con tecnología de punta”, aseguraron.
Aun así, el robo de combustible persiste, aunque ha disminuido, pero emergencias como la de ayer en Tepeji del Río, deja ver cómo quienes se dedican a la ordeña clandestina difícilmente dejaran este negocio y también han optado por perfeccionar su modus operandi.