Pedro Sánchez pide perdón por corrupción; descarta adelantar elecciones

Pedro Sánchez pide perdón por corrupción; descarta adelantar elecciones. FotoAgencias

El presidente español Pedro Sánchez reconoce “graves indicios” contra Santos Cerdán y ordena su dimisión; afirma que continuará al frente del gobierno hasta 2027

Con el rostro serio y visiblemente abatido, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, compareció este martes de manera urgente desde la sede del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) para ofrecer disculpas públicas ante un nuevo escándalo de corrupción que sacude a su entorno más cercano.

Esta vez, los señalamientos recaen sobre Santos Cerdán, secretario de Organización del partido, acusado de presunto cohecho, cobro ilegal de comisiones y fraude electoral.

Pido perdón a la ciudadanía, a los militantes y simpatizantes del PSOE. Hasta esta mañana creí en la integridad de Santos Cerdán, pero los indicios son graves, muy graves”, declaró Sánchez tras conocer el contenido del informe elaborado por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, que documenta más de 500 páginas de pruebas, grabaciones y testimonios que comprometen a Cerdán y otros colaboradores cercanos del presidente.

A pesar de la magnitud del caso, Sánchez descartó adelantar elecciones o disolver las Cortes Generales: “No va a haber convocatoria electoral hasta 2027”. Subrayó que, aunque la decepción es profunda, la respuesta debe ser firme: “En este mundo no existe la corrupción cero, pero sí debemos atajarla”.

La dimisión de Cerdán se suma a la larga sombra de corrupción que ha rondado a Sánchez desde su llegada al liderazgo del PSOE. Tanto José Luis Ábalos, exministro de Fomento, como Koldo García, exasesor, también enfrentan investigaciones judiciales por delitos similares, incluyendo tráfico de influencias y evasión fiscal a través de una red ilegal de hidrocarburos.

El presidente anunció que su partido se someterá a una auditoría externa, con el objetivo de transparentar las cuentas internas del PSOE, especialmente aquellas relacionadas con los periodos en que Cerdán y Ábalos ocuparon la Secretaría de Organización.

Sánchez reconoció su vínculo personal y político con Cerdán desde 2014, calificando como una “enorme decepción” los hallazgos de la UCO. No obstante, denunció que el gobierno enfrenta una campaña de asedio por parte de la oposición: “Se nos ataca con cuestiones que nada tienen que ver con la realidad”, dijo.

Con este episodio, el Ejecutivo de coalición liderado por Sánchez enfrenta su crisis más grave desde 2018, en un contexto de creciente presión mediática y política. Aun así, el mandatario se mantiene firme en su decisión de continuar al frente del gobierno.