Esa es la interrogante que me han planteado varios de mis compañeros antorchistas, después del enésimo intento de búsqueda de diálogo con el gobernador del estado, licenciado Julio Menchaca, el pasado 6 de septiembre, día en que rindió su 2º Informe de gobierno “ante el pueblo de Hidalgo”, fecha en que parte de ese pueblo, alrededor de 5 mil hidalguenses, fuimos recibidos por la policía estatal y por una manada de porros contratados para tal efecto por el gobierno del estado; por cierto, me llamó la atención que dentro de los personajes que comandaba esa caterva del lumpenproletariado se encontraba el actual subsecretario de gobernación ¡Saque usted sus nada difíciles conclusiones!
Me da pena ajena cuando leo algunas notas de prensa relacionadas con el evento del susodicho informe y de los resultados de la actual administración; cuando leo, por ejemplo: “Respaldado por el pueblo hidalguense, el gobernador, Julio Menchaca Salazar, rindió su Segundo Informe de actividades, acto en el que destacó el impulso a programas que generan calidad de vida e inversiones históricas en materia de infraestructura, educación, seguridad y combate a la corrupción”. Y me da pena ajena, tanto por la prensa obligada a mentir para poder sobrevivir como por el propio mandatario, obligado también a mentir y usar eufemismos para poder llamarse “gobernador del pueblo”.
¿Respaldado por el pueblo? Si vemos las fotos del evento nos encontramos que ahí, en primera fila, no estaba el pueblo; estuvo respaldado por los empresarios y por la clase política de Hidalgo, esa que, por cierto tanta repugnancia le causa a los fanáticos de la 4T. Afuera, bajo la lluvia, estaba el pueblo clamando justicia y solución.
La nota en cuestión nos señala que el gobernador, en su informe destacó “el impulso a programas que generan calidad de vida en inversiones históricas en materia de infraestructura, educación, seguridad y combate a la corrupción”. Cuando lo escuchamos o leemos así, sin más cuestionamiento, quizás a muchos impacte y hasta anestesie o quede sumergido en un plácido y profundo sueño entre nubes tipo cúmulus, pero, ¿qué nos dice a gritos la realidad hidalguense? En primer lugar, que en materia de infraestructura nuestro estado, en estos dos años de gobierno morenista, prácticamente, nada ha cambiado: los caminos y carreteras en todo el estado están destrozados, la zona metropolitana de Pachuca, intransitable por tantos baches; así que tenemos derecho a preguntar ¿en qué caminos o carreteras se invirtieron los más de 4 mil millones de pesos? Obviamente, descontando la carretera Real del Monte-Huasca, que inició antes de la actual administración, y la construcción del tramo de la carretera Apan-Emiliano Zapata, que conecta a la zona industrial.
¿Impulso a la educación? Tengo la impresión que el impulso ha sido más bien a sus aliados del sindicato de la educación, porque a los maestros de a pie, esos que trabajan con salarios de hambre y en condiciones infrahumanas, para ellos y sus alumnos, las cosas no han cambiado: solo recordemos lo que el propio secretario de educación del estado reconoció que: “La Secretaría de Educación Pública de Hidalgo (SEPH) tiene registro de por lo menos 600 escuelas con una infraestructura en pésimo estado…” “Que mil 362 escuelas siguen sin agua potable, es decir, están en condiciones insalubres; que el 67% de las escuelas de educación básica no tienen internet”.
¿Combate a la corrupción? De acuerdo a diferentes medios de comunicación, la estafa siniestra del gobierno del morenista Omar Fayad, ascendió a más de 5 mil millones de pesos, y ahora, en este segundo informe de gobierno, nos vienen a decir que: “Se ha llevado a cabo una auditoría donde han identificado el desvío de recursos sin precedentes. Hasta el momento suman 71 denuncias penales con más de 40 vinculaciones a proceso de expresidentes municipales, exfuncionarios y servidores públicos”. Y que han recuperado 240 millones de pesos, pero ¿qué son 240 millones en relación a los más de 5 mil millones de pesos robados al erario? El 4.8% de la estafa a los hidalguenses; pero, además, y los verdaderos responsables de la estafa ¿dónde están?
También se nos informó que: “Se han convenido 87 proyectos de inversión con empresas nacionales e internacionales por un monto de 84 mil millones, generando 122 mil empleos directos e indirectos en 31 municipios”. Entonces, nos deben explicar mínimamente la paradoja, de que, a pesar de tan cuantiosa inversión y tantos empleos generados ¿por qué el reporte federal reveló que Hidalgo fue la entidad que tuvo el mayor incremento de la pobreza laboral entre el tercer y cuarto trimestre del año pasado con respecto a la segunda mitad de 2022, al crecer 3.3 puntos porcentuales, por lo que pasó de 41.9 por ciento a 45.2 por ciento en la variación anual? (13 marzo de 2024).
¿Ahora los hidalguenses tenemos mejor salud? De acuerdo a lo dicho por el señor gobernador en su informe, se llevó a cabo la “Remodelación de los centros de salud en el 75 por ciento de los municipios con una inversión de 114 millones” Y la pregunta obligada (además de confirmar dicha remodelación y esa cuantiosa inversión, que aún mi ojos no han comprobado) ¿Y tienen médicos calificados esos centros de salud? ¿Ya tienen medicamentos? También nos informó de “la transición de 501 centros de salud y hospitales IMSS-Bienestar” Y, ¿ya con eso tenemos una salud garantizada? En cuestión de salud, como dijo, el caradura del presidente López Obrador ¿Nuestro sistema de salud es mejor que el de Dinamarca? También se nos informó de la “Conclusión de la segunda etapa del Hospital de Actopan con una inversión de 111 millones de pesos en beneficio de 123 mil habitantes”. Esos habitantes, ¿ya pueden ir al hospital con toda confianza a curarse? ¿ No les pedirán las jeringas, los materiales de curación, los guantes para los médicos y enfermeras y el medicamento que requiere el paciente?
En fin, a la interrogante de ¿qué sigue? Yo sólo les puedo responder “el éxito llega sólo a los que nunca se rinden”. No nos rendiremos, seguiremos luchando por un México y por un Hidalgo sin pobreza; insistiremos una y otra vez en que se atiendan las justas demandas de los hidalguenses organizados en el Movimiento Antorchista; lucharemos todos los días para organizar y educar al pueblo y formar una fuerza humana poderosísima que se imponga ante las injusticias y gobierne con sabiduría y empatía con el pueblo mexicano. ¡Continuaremos!