Niños de Ayahualtempa, Guerrero cambian los libros por armas para defender sus comunidades del acecho de los narcos
Ante la más evidente falta de gobernanza en el estado de Guerrero, niñas y niños son armados y entrenados para formar parte de la Policía Comunitaria de Ayahualtempa.
Tal es la crisis de inseguridad y falta de apoyo de los tres órdenes de gobierno que, en la montaña baja de Guerrero están reclutando a los menores y entrenándolos en el uso de arlas de fuego para hacer el trabajo que ni la Guardia Nacional ni la policía estatal pueden hacer en esa región.
Es así, ante este triste panorama que la Policía Comunitaria de Ayahualtempa cumplió con presentar a 5 niñas y 15 niños armados, de entre 15 y 17 años, como integrantes de la policía comunitaria.
Ante una asamblea comunitaria realizada en Ayahualtempa, municipio de José Joaquín de Herrera (Hueycantenango), vestidos con playeras verde olivo y cubiertos del rostro, rindieron juramento para defender a su pueblo del constante acecho del crimen organizado: ante el temor generado por los asesinatos y desapariciones generados en los últimos años y días.
La presentación sucede a menos de 24 horas de que el gobierno del estado, mandos militares y policiacos se reunieran con las autoridades del lugar.
Después de que criminales, integrantes de los ardillos se llevaron a una familia que se encontraba pastoreando a su ganado. La policía comunitaria se quejó de que las autoridades federales, estatales y municipales no realizaron ninguna acción para la búsqueda de los cuatro integrantes de esta comunidad.
Es de mencionar que, precisamente el líder del grupo de los Ardillos es quien aparece en videos departiendo con la presidenta municipal de Chilpancingo.
Lamentan los nulos resultados de las autoridades.
Los Coordinadores de la CRAC-PF reprocharon que el operativo de búsqueda implementado por la Policía Estatal, la Fiscalía General del Estado (FGE), la Guardia Nacional y la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), sólo se está limitando a hacerse dentro del denominado “territorio comunitario”.
Lo anterior, porque ya se informó a la FGE que los integrantes de la familia están retenidos en Tlaniculilco, municipio de Quechultenango, principal bastión de Los Ardillos.
De acuerdo con los representantes de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias – Pueblos Fundadores (CRAC-PF), solo los mayores de 15 años cuentan con la capacidad para organizar y defender su pueblo.
Los policías comunitarios, desde la semana pasada están metidos de lleno en los operativos de búsqueda de la familia que fue privada de su libertad.
Ante la falta de acciones, la CRAC-PF está en la búsqueda de Cecilia Gaspar Hernández, de 50 años, su esposo José Teodoro Domingo Ortiz, de 52 y sus hijos Roberto y Gaudencio, de 30 y 22 años, respectivamente, “porque sus familias están desesperadas”.
Los niños solamente asumen el resguardo de la comunidad, en el caso de que los adultos salgan a realizar recorridos fuera, por alguna situación de emergencia.
Mientras que, Taxco lleva cuatro días en calidad de pueblo fantasma por las amenazas del crimen organizado. No hay transporte público, las escuelas cerradas, y el comercio suspendido, sin turismo; mientras su alcalde se encuentra de promoción turística en Madrid. Discordante totalmente.
Y es que el fin de semana asesinaron en Taxco a un conductor del transporte público, lo que causo el paro de transportistas.
