Desinformación: No te creas todo lo que ves en tu móvil

No te creas todo lo que ves en tu móvil. Hay que verificar antes de creer. FotoEspecial

Verificar antes de creer; la desinformación se propaga solo por dar credibilidad porque proviene de contactos de confianza

 

Es importante destacar la labor imprescindible de los verificadores de la información, ya que la desinformación llena nuestros móviles.

La ruta es la siguiente: Primero, nos llega por WhatsApp y le damos credibilidad porque proviene de nuestros contactos. Después, esa información se viraliza en redes como TikTok, X o Facebook.

Charlotte y Shayan son dos prestigiosos verificadores que se ha reunido para reflexionar sobre su trabajo. «Si eres capaz de lograr que una persona que cree en algo que es viral, y no está en lo cierto, cambie su opinión, eso es el trabajo bien hecho», expresa Shayan Sardarizadeh.

Los expertos cuentan que el ataque casi de película a Trump ha sido otro filón para los creadores de bulos, como ya lo fueron las crisis de desinformación con Gaza o Ucrania.

Es sabido que la desinformación empieza en plataformas de mensajería cerrada, como como Telegram, WhatsApp o Signal. Es la forma más sencilla para crear un grupo de gente con las mismas ideas y creencias políticas. Charlotte Maher, experta en desinformación en ‘Bellingcat’, señala que es donde suele darse este peligroso fenómeno.

Después, esta se viraliza en TikTok, X o Facebook, porque es donde compartimos y amplificamos nuestras opiniones.

En este sentido, Shayan Sardarizadeh, periodista de ‘BBC Veriffy’ destaca que TikTok «es particularmente importante porque tiene una base de más de 1.000 millones de usuarios».

De esta forma, es, junto a Telegram, la más peligrosa: «Hemos visto en el pasado cómo puede cambiar la opinión pública, que puede luego cambiar el voto y las elecciones, por ejemplo, con el Brexit», subraya al respecto Charlotte Maher.

Charlotte Maher destaca que Gaza «es uno de los temas más complicados, si no el que más», y argumenta el por qué.

«El área no está mapeada con satélites, el acceso de onternet es restringido, el ‘facticheking’ es difícil y la verificación también». Como la tensión política y las creencias sobre el tema son firmes, es difícil hacer que la gente se salga de esas creencias, lamenta la experta.

Estas creencias son, en ocasiones, generadas por bots: «Los rusos tienen una extensa red de bots y de financiación, se ha comprobado una y otra vez que su propaganda funciona; es un modelo que se replica, y no es el único país que lo hace», afirma la experta en desinformación.

De ahí, la importancia de seguir combatiendo narrativas llenas de desinformación